Hospital Privado Universitario de Córdoba1 dio un paso más en innovación y calidad médica con la incorporación de un nuevo tomógrafo intraoperatorio, una tecnología que transforma la manera en que se planifican y realizan las cirugías de alta complejidad.
Con esta incorporación, se convierten en el primer centro de salud de Córdoba en contar con este equipamiento de última generación, reafirmando su compromiso con la excelencia, la seguridad y el cuidado integral de cada paciente.
Imágenes en tiempo real para mayor precisión y seguridad
Este nuevo tomógrafo permite obtener imágenes tridimensionales (3D) y bidimensionales (2D) durante el desarrollo de la cirugía, brindando a los equipos médicos una visualización en tiempo real de la anatomía del paciente.
De esta forma, los profesionales pueden verificar el posicionamiento de los instrumentos y dispositivos antes de finalizar la intervención, asegurando la exactitud del procedimiento y reduciendo la posibilidad de cirugías posteriores.
A diferencia de los sistemas de imagen convencional, este equipo se utiliza directamente en el quirófano, sin necesidad de trasladar al paciente. Su estructura móvil y adaptable facilita su integración al flujo de trabajo quirúrgico, lo que permite optimizar los tiempos y mejorar la experiencia tanto del paciente como del equipo médico
«La incorporación del tomógrafo intraoperatorio O-ARM marca un hito para la cirugía de alta complejidad en Córdoba, reafirmando nuestro compromiso con la innovación y la calidad. Es una inversión directa en seguridad y precisión de nuestros procedimientos quirúrgicos, elevando nuestros estándares de calidad y, por ende, el cuidado de nuestros pacientes», afirmó el Dr. Federico Perrote2, Director Médico del Hospital Privado.
¿A qué tipo de pacientes está dirigido?
El tomógrafo intraoperatorio está especialmente indicado para cirugías de columna, neurocirugías y procedimientos de mínima invasión que requieren una precisión milimétrica.
Esta tecnología resulta de gran utilidad para verificar la correcta colocación de tornillos o implantes, evaluar la alineación de estructuras óseas y confirmar el éxito de la intervención antes de que el paciente salga del quirófano.
Entre los principales beneficios para los pacientes, se encuentran reducir los riesgos asociados a la cirugía y favorecer una recuperación más rápida y segura.
¿Cuáles son sus beneficios?
Entre sus principales beneficios para los pacientes se destacan:
Un nuevo estándar en la cirugía de alta complejidad
Con esta incorporación, Hospital Privado se consolida a la vanguardia en tecnología quirúrgica, integrando herramientas que potencian la precisión, la eficiencia y la seguridad en cada intervención.
Ser los primeros en la provincia en sumar este tipo de tecnología, refuerza la vocación por ofrecer a los pacientes los más altos estándares de atención, combinando innovación tecnológica con la experiencia y el profesionalismo de sus equipos médicos. Como institución acreditada por la Joint Commission International (JCI), garantizan los más altos estándares de calidad y seguridad en la atención, consolidando su liderazgo en medicina de alta complejidad.